Taller de Masaje Infantil

Dar un masaje a un bebe o a un niño es algo que comunica amor, libera tensiones y ayuda a comprender mejor las necesidades de su hijo.

A los padres también les ayuda a sentirse seguros en su capacidad de hacer algo positivo por ese ser que está a su cargo.

Los psicólogos estudian los tipos de conexiones que formamos en nuestra infancia para asi poder predecir los tipos de relaciones que tendremos de adultos. Las personas cuya infancia fue segura, a los que se cogía en brazos y se escuchaba, que tuvieron un buen contacto ocular con sus padres y que fueron normalmente queridos y apreciados, tienden a tener relaciones mas saludables con los demás. No les cuesta acercarse a otras personas y tampoco tienen problemas con la interdependencia ( la capacidad de depender positivamente de alguien o de que alguien dependa de nosotros ) . establecen relaciones felices y confiadas , sus historias amorosas duran mas y acaban menos en divorcio que las otras. Por otro lado, los bebes y niños cuyos lazos de vinculación son inciertos o teñidos de ansiedad, son luego menos empáticos con los demás y menos eficaces a la hora de conseguir ayuda de otras personas. Sus relaciones carecen de confianza e intimidad; sus amistades y sus matrimonios están teñidos por los celos, por problemas de entrega y por miedos diversos. Aquellas personas cuyos vínculos se rompieron de forma repetida en la infancia tienen un riesgo mucho mayor de convertirse en criminales sociópatas en su edad adulta, a menos que reciban una intervención seria a una edad temprana.

Los vínculos de confianza y amor, las lecciones de ternura, calidez, apertura y respeto que aparecen en la rutina del masaje, acompañan a la persona hasta llegar a la edad adulta.

Si sus practicas educadoras como padres reflejan además los mismos valores que el masaje infantil, le resultará mas fácil a su hijo acercarse a los demás con empatía y calor, podrá responder a los problemas sociales con compasión y altruismo, y experimentar la vida como una aventura alegre en la que ha tenido la oportunidad de amar y ser amado, de ayudar a otros y de ofrecer su ayuda y personalidad en un servicio genuino a la humanidad.

Hay una frase del Dr . FREDERICK LEBOYER que dice:
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Las caricias, los contactos piel con piel, los masajes, todo ellos alimenta al niño. Es un alimento tan necesario como los minerales, vitaminas y proteínas.

El curso se realizará durante un fin de semana

En horario de:

Sábado de 10 a 14 y de 16 a 20
Domingo de 10 a 14

El precio de este curso es el total de la matrícula.

180,00 € I.V.A incluído.

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